En este capítulo, los Fruittis se encuentran en una oscura y espeluznante cueva durante su viaje en busca de un nuevo hogar. Al caer la noche, comienzan a escuchar ruidos extraños y a ver sombras que los asustan. Los personajes, especialmente Mochilo y Pincho, empiezan a temer lo que podría acechar en la oscuridad.